Conceder la atención en el momento que el paciente la amerita, conforme a los conocimientos médicos y principios éticos vigentes, que permitan satisfacer sus necesidades en salud, buscando siempre la mejora continua.

Asegurar la accesibilidad, oportunidad, pertinencia, seguridad y continuidad en la atención, respetando su condición y dignidad humana, reconociendo los derechos humanos adaptados en la institución para prevenir y eliminar cualquier tipo y forma de discriminación, su contexto socio cultural y la diversidad poblacional y territorial que se expresa en la particularidad de su desarrollo.

Garantizar todos los mecanismos, medidas y acciones preventivas necesarias para la prestación del servicio, asegurando la disminución del riesgo y evitando los eventos adversos durante el proceso de atención integral. Para esto la Corporación de Lucha Contra el Sida cuenta con una política de seguridad del paciente en el marco de una política de calidad.

Se proporciona una atención eficaz, humanizada, cálida y cordial, procurando un bien común y colectivo, a través de la proactividad y el trato digno y humanizado hacia el otro.

Se trabaja de manera constante siendo conscientes de nuestros actos, bajo un enfoque de eficiencia y eficacia en nuestros procesos, permitiéndonos mejorar continuamente, cumplir con nuestros deberes y con las necesidades de nuestros usuarios y demás partes interesadas.

Se genera empatía y comprensión al entender la realidad del otro, tomando consciencia de su necesidad, permitiéndonos aportar en la superación de sus dificultades y fomentado del valor social.

Se garantiza un adecuado manejo y custodia de la información, generando confianza y seguridad para cada una de las partes interesadas.

Se fomenta el trato justo e igualitario, aceptando, apreciando y valorando las cualidades del otro, actuando desde el reconocimiento de sus derechos y deberes.